Sabemos por Freud que
la sociedad se crea por un crimen cometido en común. Sin embargo, un país
instalado en la mentira está condenado a la aniquilación.
Hay que meter cemento
en la selva para hacer Brasilia. Lo que verdaderamente cuenta es la actitud de
conducta.
En nuestros sueños
comienzan nuestras responsabilidades.
Hay que ser educado con nosotros mismos.
Algo así como saber ver los elefantes blancos en la tormenta.